Sobre esa vez en la que viajé al futuro #

Para las personas que estaban a mi alrededor quizás haya sido sólo un instante, un parpadeo.

Para mí, fueron 15 minutos en una realidad alternativa.

El pasaje fue imperceptible… un segundo estaba caminando por la avenida más transitada del país, levanté la vista para ver la posición del sol y estimar la hora del día, estaba apurado…

El sol me hizo cerrar los ojos y mientras bajaba la vista, mi cabeza se sentía como cuando sufrimos un cambio de presión, mareado pero no lo suficiente como para perder el equilibrio…

Al abrir los ojos me encontraba caminando por un prado de pastos color verde-violeta, que brillaba con el sol…

La luz del sol… había cambiado…

Decir que estaba confundido sería subestimar la situación. Todo se sentía real, así que tenía que ser real… pero… que demonios?!?!?

Dónde estoy?

Me faltaba el aire. Ataque de pánico?… Cálmate y respirá, pensé.

Miré a mi alrededor y enseguida noté que el prado en realidad era un parque rodeado de civilización.

Al este, edificios altos a un lado, construcciones bajas por el otro.

Al norte, muy lejos en el horizonte se veía una construcción enorme, el perfil la hacía confundir con una montaña gris… ominosa.

Al oeste y al sur… árboles? el parque era grande.

Hacia el este, se veía un pequeño puesto que parecía la salida del parque. Me dirigí hacia allí para, con un poco de suerte, encontrar a alguien y preguntarle ¿dónde demonios estoy?

Llegando al puesto me faltaba un poco el aire… El puesto estaba vacío… del otro lado, se veía la calle y unas construcciones bajas, que quiero pensar eran casas de familia?

Nadie a la vista…

Pensé: después de todo es cerca de medio día y tal vez están todos almorzando… sí… eso debe ser.

La ciudad estaba cerca, parecían ser 5 o 6 cuadras… así que me dirigí hacia los edificios altos.

A medida que me acercaba, la calle por la que caminaba se ensanchaba y se convertía en avenida…

Pensé: Me falta el aire, tengo que hacer más ejercicio.

Al otro lado de la avenida, se veía una calle ancha que se extendía hacia el este y parecía peatonal.

No podía distinguir bien, pero parecía mucha gente caminando toda apurada en grandes grupos.

Me falta el aire…

Pensé: Ahí voy!… seguro una de esas personas me puede explicar que pasó, dónde estoy?

Cruzar la avenida… fácil… pero, no hay esquinas, ni cruces peatonales, no hay luces… no hay vehículos?!?!?

Crucé ahí mismo donde estaba y, de uno de esos grupos, una de las personas que notó mi presencia, se paró, giró hacia mi y me hacía señas, como si yo estuviera haciendo algo mal.

Mirando para ambos lados, me apuré a cruzar en la dirección de esa persona.

A medida que me acercaba… la persona… perdía su figura… de lejos parecía un hombre de mediana edad de pelo largo… pero a medida que me acercaba… no le podía distinguir la cara… el pelo… no se movía como pelo…

Ataque de pánico? Me falta el aire!…

Llegué al otro lado de la calle y no pude evitar esquivar al ser que tenía frente a mí… era… alto… flaco… parecía que estaba cambiando la forma para imitarme…

Me asusté… pensé en correr en la dirección opuesta!

Pensé: Me falta el aire… no es normal… se hace más difícil respirar ahora que estoy cerca de estos seres…

Entré en pánico… me falta el aire… me ahogo!!!!

Me tropecé, choqué hombros con uno de esos seres y…

Volví…

Una mujer de mediana edad me pedía disculpas por haberme chocado en la avenida más transitada del país.

Podía respirar tranquilo.

Quiero creer que era el futuro, pero no puedo estar seguro. Tal vez era otra dimensión u otro universo.

Historia corta de ficción, escrita por Gastón E. Alegre Stotzer en Noviembre de 2022. Todos los derechos reservados.